La oferta de cocinas eléctricas en el Ecuador es limitada y los precios en los almacenes no son competitivos con aquellos de las cocinas que usan como combustible el Gas Licuado de Petróleo (GLP).
El anuncio realizado el sábado pasado por el presidente Rafael Correa, de retirar el subsidio al gas en 2016, ha incentivado a los consumidores a consultar qué tipo de alternativas hay en el mercado.
Para que se dé la eliminación del subsidio tienen que cumplirse dos condiciones. La primera, que entren en operación las nuevas ocho centrales hidroeléctricas (Coca-Codo Sinclair, Sopladora, Toachi Pilatón, entre otras). La segunda condición es que se lleve a cabo una campaña nacional de reemplazo de cocinas de gas por cocinas eléctricas de inducción, de mayor eficiencia.
Este programa tiene un antecedente en el programa de entrega de cocinas de inducción que llevó a cabo el Ministerio de Electricidad entre el 2009 y el 2012 en las poblaciones fronterizas del Carchi. De acuerdo con cifras oficiales, se regalaron alrededor de 5 000 cocinas de inducción para desplazar el uso de GLP y reducir el contrabando hacia Colombia. A cada familia se entregó una cocina de inducción de dos quemadores más dos ollas y una sartén de materiales ferromagnéticos, especiales para este tipo de cocinas.
Sin embargo ahora en los almacenes de electrodomésticos practicamente no existen , estan agotadas las cocinas de inducción. Y donde las hay alcanzan valores de entre 800 y 1500 dolares, pero en el mercado internacional se las encuentra desde 30 dolares.
El consumo de energía eléctrica de una familia con un promedio de 5 personas, aumenta alrededor de 8 dolares mensuales.
